En el pasado viaje a Londres, era obligado parar el domingo por Brick Lane. El barrio bangladesí de la ciudad. Es conocido por nosotros los guiris, por su Brick Lane Market (para mí el menos comercial y original a día de hoy) y por su ambiente, donde los londinenses auténticos y los turistas nos mezclamos.
El sitio perfecto para estrenar mis Dr. Martens Adrian Loafer, con su famosa suela neumática con amortiguación de aire. Cuando los pruebas entiendes que los carteros o policías británicos no se los quitaran.
La parada obligada es el Café 1001, abierto desde por la mañana a la noche. Desayuno, cervezas o fiesta son posibles en él. Ambientazo asegurado.
Recuerda visitar Instargram 😉
Son una maravilla de zapatos , lo quiero pero ya .
Preciosos !